Mediodía

Mediodía. Muy cansada,
voy adelante con todo
lo que mi mirada abarca...

Voy caminando en la vida
hacia una playa dorada
en que vuelva la alegría
de sentirse enamorada...

Y es que siempre, de algún modo,
se recobra la esperanza...

A. López

Recodos

¡Se mueve la vida
en pasos tan breves
entre cielos claros,
entre amaneceres...!

A veces soñando,
a veces pensando,
pero alegre siempre
en honda alegría.

Se nublan en tristes
y moradas nubes
en algunas tardes
de ocasos con fuerza,

y pasa el recodo
del corto camino:
de nuevo amanece
el cielo azulísimo...

A. López

Buscando no decaer...

Buscando no decaer
pase lo que pase;
salir adelante trabajando,
con algo entre mis manos...

Pasan los días,
y me veo ese declinar
de la inactividad,
del añorar el quehacer...

Y me subleva,
tal vez con demasiada tristeza...
Pero sigo pensando
que en el cielo tengo un ángel.

A. López

Madrugada de verano...

Madrugada de verano...
Y pongo el aire acondicionado,
ese que vela mi sueño siempre
desde un viaje que ya es pasado...

Al menos tengo alguna esperanza
de que las cosas cambien mañana
y me refresque en una piscina
en vez de estar tanto aquí metida...

Desde la alergia que me da sueño
hoy improviso sobre el teclado
de este entrañable cacharro viejo
sólo un poema aunque un poco raro...

Será el insomnio y estos colores
que salen siempre entre tantas flores
que más bien pienso que es ya manía:
viene el calor, se me va la vida...

A. López

Silencio

Dan las cinco en el reloj...
Aún dormida escribo un verso
pensando en lo que acabó
sin casi poder tenerlo...

Un silencio sólo roto
por ese timbre tan quedo
de cita furtiva inquieta
en este enorme silencio...

Y un café y otro café
de mi máquina Nesspresso...

A. López

Delante

Mediodía,
ya más animada, casi contenta.
Se enciende la vida
en posibilidades superpuestas...

Me muevo y avanzo,
aunque poco, aunque despacio...
Y ahora descanso
con una sonrisa en los labios.

Mediodía
en la ciudad. Mi poesía
ha encontrado la esperanza
en un hueco de silencio del día...

A. López

Corazón

Mi corazón, cansado,
empieza a latir de nuevo
ante lo bello...

Es un latir distinto,
ya más sereno...

Me pone triste a veces,
aunque no quiero...

No es un latir alegre
sino triste y callado;
es un latir distinto:
ya no está enamorado...

A. López